Aventura clásica en formato píxel

El emblema del Perro Rabioso
El emblema del Perro Rabioso

Naughty Dog, perro rabioso… bajo este peculiar nombre encontramos el que se ha convertido, pasito a pasito, en el Pixar del mundo de los videojuegos.

 

Esta empresa estadounidense nació en 1986 con el nombre de JAM pero fue algo anecdótico pues solo tres años después, en 1989, paso a ser Naughty Dog. Durante 10 años aumentó sus recursos gracias a la creación de juegos de más o menos presupuesto. No fue hasta 1996 cuando lanzaron el videojuego que les daría notoriedad: Crash Bandicoot. Todo el que tuviera una, por aquel entonces, joven Playstation, conoce al que se etiquetó como “la mascota de la Play”, parecida a un perro con cierto grado de locura, rabioso. El juego era un plataformas 2D con clara inspiración en Sonic the Hedgehog, el buque insignia de Sega, pero con una ambientación mucho más desenfadada y con grandes dosis de humor.

 

El éxito de Crash Bandicoot, y sus múltiples secuelas, supuso la compra por parte de Sony de Naughy Dogen 2001 y el nacimiento de otra gran saga, esta vez para Playstation 2: Jax & Daxter. Otro plataformas pero esta vez con dos protagonistas y el evidente salto tecnológico: un mundo fantástico en tres dimensiones, animaciones faciales de los protagonistas, diálogos cargados de humor. En resumen, una licencia que superaba el listón de Crash Bandicoot.

 

Y nació PlayStation 3. En 2006 ya todos los jugones consoleros nos preguntábamos qué sería lo nuevo de los Perros Rabiosos. Afortunadamente la respuesta no tardó en llegar: supuso el primer triple A exclusivo de PS3, acompañó a la consola en su lanzamiento, elevo a la categoría “Pixar” a Naughty Dog y es la saga de la que voy a hablar: “Uncharted”.


Existe un género que gusta a la gran mayoría del consumidor, ¿quién no ha visto películas, leído libros o simplemente escuchado historias de aventuras? Esas en las que el protagonista, tras conocer un mito o la existencia de un tesoro, se lanza en su búsqueda, descubriendo lugares exóticos y personajes variopintos. Eso es lo que debieron pensar los chicos y chicas de Naughty Dog, y con claras referencias a Indiana Jones, se embarcaron en crear su propio videojuego de aventuras. Así nació Nathan Drake, protagonista absoluto y carismático de la saga. 


Pincha para ver a Drake en acción
Pincha para ver a Drake en acción

Es un personaje diseñado para empatizar con el jugador: no es demasiado atractivo, visualmente puede no llamar demasiado la atención y raya la normalidad más absoluta comparándolo con otros protagonistas extravagantes de otros juegos. Pero cuando llevas cinco minutos poniéndote en su pellejo, disfrutando de su jugabilidad y de sus cómicos comentarios, Nate Drake es un personaje que se hace un huequecito en tu corazón. Después de cuatro juegos, apenas sabemos nada de su pasado, dato curioso, no conocemos su familia, ni su procedencia, solo que tiene grandes conocimientos de historia y arqueología, que posee un anillo colgado al cuello que, según el, perteneció a un antepasado suyo, el corsario inglés Francis Drake, y que conoce desde su infancia a su compañero de fatigas Victor Sullivan, "Sully" para los amigos. A partir de aquí, el resto de personajes son conocidos de su oficio, en su gran parte rivales, y, como no podía ser de otro modo, las chicas de las que se enamora en sus aventuras, aunque él sea demasiado "independiente" para admitirlo, con Elena Fisher destacando sobre las demás.

¿Dónde está Drake?
¿Dónde está Drake?

Todas las entregas siguen una misma estructura de misterio-tesoro por resolver y encontrar con un grupo rival (mercenarios, piratas modernos, organizaciones secretas...) viajando en paralelo en pos del premio, que se encarga de ponernos las cosas difíciles. Luego los múltiples giros de narrativa (traiciones, situaciones peligrosas, hallazgos arqueológicos...) nos hacen mantenernos pegados al mando, deseando saber que reto nos espera tras la siguiente esquina. Una seña de identidad de Uncharted son sus momentos de acción extrema: salir a duras penas de un tren a punto de despeñarse por un acantilado, ser perseguidos por un helicóptero por las azoteas de una ciudad, correr mientras un puente de piedra se derrumba tras nosotros, luchar contra un gigantón (como Indiana Jones) sobre la rampa de descarga de un avión fuera de control y a punto de estrellarse contra un desierto... son algunos de los “pequeños” obstáculos que se interpondrán en nuestro camino. Camino por el cual, por cierto, nos acompaña una de las mejores bandas sonoras de los últimos tiempos: su tema principal tiene fuerza y seña de identidad. Ya quisieran muchas películas de aventuras tener una partitura así.

Técnicamente hablando, la saga raya un nivel extraordinario, siguiendo una progresión desde el primer juego, que exploraba las capacidades de una joven Playstation 3, hasta la tercera parte que ha dejado el listo gráfico a una altura que no ha sido superado seis meses después de su lanzamiento (mención aparte para la versión portátil de Playstation Vita, que sin superar lógicamente a sus hermanos mayores, es un alarde técnico en un hardware portátil). Como dato curioso hay que destacar que los movimientos de los personajes se realizaron mediante las últimas técnicas de captura de movimiento, pero sus animaciones faciales se crearon artesanalmente, obteniendo como resultado una animación fluida y sin artificios que aúna sabiamente lo mejor de ambas técnicas.

 

Los Uncharted son juegos algo cortos (hablamos de unas diez horas de media por cada juego) y muy lineales, seguimos un único camino prefijado que nos lleva por toda la historia. Estos son, según muchos, sus grandes defectos, pero teniendo en cuenta que son experiencias increíblemente intensas y divertidas es fácil volver a jugarlos. Si quisiera un juego con más libertad cogería un Assassin´s Creed o un Grand Theft Auto, grandes juegos con misiones secundarias y más largos, pero con un ritmo más pausado.

 

En Naughty Dog está claro que no hacen juegos al uso, los crean con mimo y en el caso de Uncharted con una clara tendencia cinematográfica, con la idea de crear una experiencia cercana a la de disfrutar de una buena película en el salón pero sintiéndote tú el protagonista (de hecho, no paran de surgir rumores de una posible adaptación al celuloide; si fuera por mi Nathan Fillion sería Drake pero el proyecto ha dado tantas vueltas que...). Pienso que los Uncharted poseen una estructura perfecta para un videojuego: corto, intenso pero altamente re-jugable, de forma que cualquiera pueda acercarse a ellos, sin necesidad de ser un “jugon” habitual. Esto hace que parezca que estos genios de los video-juegos no quieran parar hasta que probemos sus juegos "el último de nosotros"…

 

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Continuará...

 

Drender

drender.render@gmail.com

 

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Comentarios: 5
  • #1

    Eldan (domingo, 01 abril 2012 20:55)

    Buen repaso a una saga necesaria como es Uncharted. El virtuosismo técnico del juego, unido al gusto artesanal por modelar cada insignificante detalle de los escenarios hacen de Naughty Dog un gran estudio de desarrollo.

    A ver qué hacen con The Last of Us, prometen que será muy cinematográfico y que no será un survival horror con zombies del montón. Tienen el voto de confianza de cualquiera con buen gusto :D

    Sobre Crash Bandicoot, matizar que no es un perro, es un especie diablo de Tasmania (lo cual justifica que de vueltas como el Taz de los Looney Toons :P)

  • #2

    El Advenedizo (miércoles, 04 abril 2012 11:16)

    Scott McLoud, en 'Reinventing Comics', decía poco más o menos que es normal que los chavales ya no lean tantos tebeos de superhéroes como antes (para los yanquis tebeos=superhéroes) porque la gracia de Superman o Spiderman es el juego de identificación y eso ya lo hacen los videjuegos. ¿Veremos languidecer el género de aventuras ahora que en lugar de ver a Shia Lebouf haciendo el mico puedes hacer tú el mico porque tú eres el mando?

  • #3

    Drender (jueves, 05 abril 2012 20:43)

    Gracias, Eldan, por tus comentarios. Tienes toda la razón al decir que Crash Bandicoot es como el diablo de Tasmania. Para mí este personaje es un recuerdo de la infancia y ya no recordaba ese detalle.
    En cuanto a si veremos languidecer el género de aventuras, Advenedizo, no lo creo. Evolucionará según el medio.

  • #4

    Cpt. Flint Baker (jueves, 05 abril 2012 20:48)

    El género de aventuras no acabará nunca, porque es uno de los esenciales. Por más participación que permitan los videojuegos, siempre acabamos volviendo a la esencia, a la recuperación de los clásicos. Para muestra, un botón: http://www.youtube.com/watch?v=SaUAO23sXok
    No tiene muy buena pinta, pero sigue siendo una adaptación de La isla del tesoro, para televisión, hecha en 2012.

  • #5

    u=40126 (miércoles, 24 abril 2013 23:50)

    This is an excellent write-up! Thanks for sharing with us!

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